Biodanza, Naturaleza y Arcilla
TALLERES
Biodanza en la Naturaleza y Arcilla
Nos despierta el Amor Ecológico
La Biodanza en la Naturaleza nos conecta con el medio ambiente en estado puro, con nuestro entorno más cercano, con la vida que existe en los árboles, plantas, tierra y animales, nos enseña el respeto por nuestro hábitat y es necesario para nuestro ecosistema, para el equilibrio del ciclo vital …
Practicar Biodanza en la naturaleza, es una experiencia muy agradable y transformadora que se practica al aire libre, nos conecta con todos los sentidos, el olfato al oler el campo, el oído al escuchar los sonidos de los pájaros y aves, la vista al ver los colores de las flores y el cielo, el tacto al tocar los árboles. Nos sana, nos conecta con nosotros mismos y se expande por nuestro cuerpo, haciendo crecer el verdadero ser que somos. Nos permite recibir lo que hay y generar sensaciones y emociones diferentes que se instalaran en nuestro cuerpo.
Nos crea un vínculo íntimo y profundo que perdura en el tiempo, que se compone de gestos cotidianos que alimentan la maravilla del otro y de la vida.

La arcilla nos trae una liberación de proto vivencias, que nos llevará a disolver nuestras formas y creencias aprendidas para nacer a otras frescas y renovadas. La arcilla nos da una gran transformación, al manejarla con las manos nos descarga tensiones, ayuda a relajarnos, nos reconecta con la fusión a la vida y con el primordial.
En las sesiones de Biodanza con arcilla, al tocarla con las manos nos lleva a un movimiento armonioso para liberar así las emociones e integrar el potencial energético-vital del ser humano.
A través de la arcilla, es el canal que nos permite hablar de mí, conforme la capacidad de entrega, de percepción de nuestras facultades y limitaciones.
Es una ceremonia que utilizando la arcilla como elemento generador nos permite llegar a la esencia sagrada de la vida.
Recuperar el contacto profundo con nuestras raíces permitiendo reconstruir el vínculo con la humanidad.

Beneficios del trabajo con arcilla:
- Ayuda a reducir el stress, rebajando los niveles de ansiedad.
- Desarrolla la creatividad, al moldear, dar forma y manipular la arcilla.
- Desarrolla y nos abre los sentidos: el tacto, el olfato.
- Nos permite liberar pensamientos y emociones.
- Nos conecta con nuestra sensualidad, nutrición, nos desarrolla la creación artística. Arte e Identidad.
- Nos regula el sistema Simpático y parasimpático.
“Amar la tierra significa respetarla, protegerla, conocerla, aumentar la conciencia de que somos parte de ella. Sensibilizar nuestra percepción de sentir su aliento, sentir el latido de su corazón”