Meditación en Valladolid
PRÁCTICA DE INICIO PARA LA MEDITACIÓN EN VALLADOLID

El ritmo que llevamos en las ciudades, en Valladolid en particular, es demasiado acelerado tanto para la mente como para el cuerpo, estamos en una sociedad «Enferma de Civilización».
Es hora de en el día a día bajar el ritmo, aquietar la mente y volver al cuerpo. Es tiempo también de disfrutar de la conexión con otras personas y aprender herramientas que enriquezcan nuestro cotidiano.
Estos talleres que te ofrezco en Valladolid están diseñados para recordar que TÚ ERES LO MÁS IMPORTANTE que tienes que cuidar, el autocuidado emocional y físico es la herramienta que tienes a tu alcance para mejorar día a día y mantenerte con buena “salud emocional”.
MEDITACIÓN E INTELIGENCIA EMOCIONAL
La meditación y la inteligencia emocional son dos prácticas que se complementan y se benefician mutuamente. La meditación es una práctica milenaria que se utiliza para calmar la mente y cultivar la atención plena. Por otro lado, a través de la inteligencia emocional, del movimiento y expresión de ellas, como te ofrezco en el SISTEMA INTEGRAL DE BIENESTAR, MOVIMIENTO Y EXPRESIÓN, donde te da la capacidad de reconocer, comprender y gestionar nuestras propias emociones y las de los demás de manera efectiva.
La meditación puede ayudarte a desarrollar la inteligencia emocional de varias maneras. Al practicar la meditación, aprendes a observar tus pensamientos y emociones sin juzgarlos ni reaccionar automáticamente ante ellos. Esto te permite desarrollar una mayor conciencia de tus propias emociones y patrones de pensamiento, lo que a su vez te ayuda a reconocer y comprender mejor nuestras emociones en diferentes situaciones.
Además, la meditación te fortalece, te hace más fuerte para regular estas emociones. A medida que practicamos la meditación, desarrollamos la habilidad de permanecer en calma y equilibrados incluso en momentos de estrés o dificultad emocional. Esto te va a permitir a gestionar tus emociones de manera más efectiva, tomando decisiones más conscientes y respondiendo de manera más adaptativa en lugar de reaccionar impulsivamente.

La meditación también puede fomentar la empatía y la compasión hacia los demás, que son aspectos importantes de la inteligencia emocional. Al cultivar la atención plena y la comprensión de tus propias emociones, también desarrollas una mayor sensibilidad hacia las emociones de los demás. Esto nos permite relacionarnos de manera más empática y comprensiva con los demás.
Personalmente, y por mi experiencia de hace muchos años en prácticas meditativas como Meditación Vipassana, Meditaciones Activas de Osho, Atención plena o Mindfulness, la meditación puede ser una herramienta poderosa para TU crecimiento personal, espiritual y TU bienestar, te ofrece una mayor conciencia de tus propias emociones, ayudándote a regularlas de manera efectiva fomentando la empatía hacia los demás.
Ambas prácticas, la Meditación y la Gestión emocional, pueden complementarse mutuamente y ser beneficiosas para nuestro Bienestar Psíquico, Físico y Emocional, favorece nuestra capacidad de relacionarnos de manera saludable con nosotros mismos y con los demás.
La meditación es una práctica que puede ayudarte a encontrar alegría en vivir.
EJERCICIO PRÁCTICO Y GUÍA DE MEDITACIÓN
Aquí tienes una guía para una meditación centrada en la alegría de vivir:
- Encuentra un lugar tranquilo y cómodo donde puedas sentarte sin distracciones. Puedes elegir una postura sentada en el suelo o en una silla, lo que te resulte más cómodo.
- Cierra los ojos suavemente y comienza a tomar algunas respiraciones profundas. Inhalando lenta y profundamente por la nariz, y exhalando suavemente por la boca. Siente cómo tu cuerpo se relaja con cada respiración.
- Lleva tu atención a tu cuerpo. Observa las sensaciones físicas, las áreas de tensión o cualquier sensación de comodidad que puedas experimentar. Permítete soltar cualquier tensión que puedas sentir a medida que te relajas más profundamente.
- Ahora, dirige tu atención a tu mente y a tus pensamientos. Observa los pensamientos que vienen y van, sin juzgarlos ni apegarte a ellos. Permíteles pasar como nubes en el cielo, mientras te mantienes en el momento presente.
- A medida que te encuentras en un estado de calma y relajación, comienza a cultivar la alegría de vivir en tu interior. Imagina una fuente de luz brillante en el centro de tu corazón, irradiando amor y alegría.
- A medida que te conectas con esa fuente de luz, visualiza cómo se expande y se llena todo tu ser. Siente cómo la alegría fluye a través de ti, llenando cada célula de tu cuerpo y cada rincón de tu mente.
- Permanece en este estado de alegría y gratitud durante unos minutos, permitiéndote disfrutar plenamente de la experiencia de estar vivo. Siente cómo la alegría se expande más allá de ti y se conecta con el mundo que te rodea.
- Si tu mente comienza a divagar, suavemente trae tu atención de vuelta al momento presente y a la sensación de alegría en tu corazón. Recuerda que la alegría de vivir está siempre disponible para ti, solo tienes que dirigir tu atención hacia ella.
- Cuando estés listo, gradualmente abre los ojos y lleva esa sensación de alegría contigo a lo largo de tu día. Recuerda que puedes volver a esta meditación siempre que desees conectarte con la alegría de vivir.
La meditación regular puede ayudarte a cultivar una actitud de gratitud y alegría en tu vida diaria. Recuerda que la práctica es clave, así que intenta dedicar unos minutos cada día para meditar y nutrir tu conexión con la alegría interior.

BENEFICIOS DE LA PRÁCTICA DE MEDITACIÓN E INTELIGENCIA EMOCIONAL
- Mejora tu Conciencia Corporal.
- Te libera de estrés y tensiones.
- Recupera la risa y el juego como expresión necesaria del niño/a interior.
- Gana flexibilidad, fluidez, agilidad, sensibilidad, afectividad…
- Autoconocimiento y comprensión del mundo interior y de tus propias necesidades.
- Relaja y expresa tus emociones.
- Apertura de corazón desde el lado más humano.
- Fortalece la conexión contigo mismo.
- Fortalece tu salud emocional al encontrar armonía, paz y felicidad.
Las sesiones que ofrezco en el Centro de Valladolid son espacios de cuidado, no juicio, progresividad y confianza, aceptando nuestro propio ritmo y entendiendo que cada uno tiene un proceso y está en un momento Vital, respetamos y escuchamos sus necesidades en todo momento.
TÚ ERES LO MÁS IMPORTANTE y tus necesidades deben ser escuchadas en todo momento.